Por Redacción El reciente hallazgo de dos hombres asesinados, embolsados y abandonados en la localidad de Santa Amalia, en el municipio de Felipe Carrillo Puerto, refleja la creciente violencia e inseguridad que afecta a la región. La identificación de uno de los cuerpos como el de Jesús Alberto Choc Díaz, un joven de 22 años reportado como desaparecido desde el 28 de enero, subraya la gravedad de la situación.
La Fiscalía General del Estado (FGE) ha confirmado que los dos hombres, incluido Alejandro Rafael Fonticiella Arcos, de 37 años y desaparecido desde el 29 de enero, fueron víctimas de homicidio violento y tortura. El descubrimiento de sus cuerpos el 31 de enero ha sacudido a la comunidad, evidenciando la vulnerabilidad de la población frente a la violencia desmedida.
El reconocimiento de Jesús Alberto por un tatuaje en su pierna derecha y las prendas que llevaba el día de su desaparición destaca la crudeza de estos actos delictivos. La presidenta municipal, Mary Hernández, ha instado a una respuesta urgente por parte de los gobiernos estatal y federal ante esta escalada de violencia que amenaza la estabilidad y seguridad de Felipe Carrillo Puerto.
Este incidente subraya la necesidad de implementar estrategias efectivas para combatir la delincuencia y proteger a los ciudadanos. La presión sobre las autoridades locales y estatales para abordar este problema de manera integral es evidente, y la exigencia de la comunidad por justicia y seguridad se intensificará en el futuro cercano. La capacidad de respuesta de las autoridades ante este desafío será crucial para restaurar la confianza de la ciudadanía en las instituciones y garantizar la paz y la seguridad en la región.
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